WeBQueST

ilustración de Mike Reed

Tener un profesor en prácticas en clase es toda una experiencia. Aun a riesgo de aceptar la responsabilidad y sufrir con desaliento algún tropezón, es una experiencia enriquecedora. Si además el profesor que llega a tu aula es ya un maestro de los pies a la cabeza la experiencia es nutridora de emociones y conocimientos en ambos sentidos. Así es como me ha pasado este curso con el alumno de Magisterio Javier Alcaraz que llegó a nuestra clase lleno de esperanza y salió con honores y más contesto que unas pascuas después de haber aprendido y haber enseñado un montón de "cosas".

Entre otras  actividades, Javier elaboró una webquest como evaluación de uno de los tema del Conocimiento del Medio.¡Cómo me gustó! Y qué bien trabajaron los alumnos.

Él nos lo cuenta con el siguiente texto:

Estaba en el aula de la seño Dolores cuando, hojeando el libro de “Coneixement del Medi”,  me encontré con el siguiente tema que iban a estudiar los alumnos de cuarto curso. "El medi i la seua protecció", un tema con mucho contenido y que a primera vista parecía un poco aburrido. Fue entonces cuando le propuse a Dolores la idea de darle un enfoque más dinámico, centrándonos en valores tan importantes como son el reciclaje y la conservación/protección del medio ambiente.

Llevaba mucho tiempo queriendo realizar una Webquest decente y aplicarla en un contexto real de clase. Este tema era una buena oportunidad para intentarlo.

Después de que la seño me diera permiso para su puesta en marcha, llegó el momento de ponerse manos a la obra. ¿Por dónde empiezo? Lo primero de todo fue leerme bien el tema, pues estaba un poco verde en algunos conceptos.

Lo siguiente fue marcarme los objetivos didácticos que quería conseguir.

Como era una práctica en vías de experimentación, no quise ser demasiado ambicioso.

Estos objetivos se centran en: el conocimiento de un ecosistema, cadena alimentaria, diferenciar entre medio físico y biológico y reconocer las acciones del ser humano en el medio y sus repercusiones.

Una vez tenía claro los objetivos, lo siguiente fue lo más sencillo. Crear y adaptar una actividad informática para cada uno de los objetivos propuestos.

Respecto al diseño, decidí enfocarlo como si fuera un recorrido (el camino del conocimiento), es por esto que lo dividí en 4 km. Cada uno de estos km tenía una serie de cuestiones que los alumnos podían contestar con ayuda de las fuentes que yo mismo les ofrecía desde la misma página web.

Las fuentes que les propuse, daban información variada de las cuestiones que debían resolver.

Los niños no tenían que copiar lo que ponía en dichas fuentes, es decir, su tarea principal era la de sintetizar toda esa información y seleccionar lo más adecuado para cada una de las soluciones.

Estos recursos podían ser textos, vídeos animados, temas digitales, blogs...

Conforme acababan el kilometro uno, pasaban al dos y así sucesivamente hasta el cuatro.

Javier  enseñando el proceso en el aula ordinaria antes de iniciar el trabajo en el aula de informática

Las respuestas de las actividades las apuntaron en cada una de sus libretas, puesto que a día de hoy los niños están demasiado acostumbrados al típico “Ctrl+c – Ctrl+v” (copiar/pegar). Tengo que decir que aunque sea un amante de las tecnologías, no olvido que la lengua oral y escrita se aprende usándola y hay que aprovechar cualquier oportunidad que tengamos para ponerla en práctica.

los alumnos de 4º de Promaria trabajando por parejas en el aula de informática

Para la evaluación final del trabajo, me centré en que los niños hayan sabido expresar con sus propias palabras cada una de las cuestiones que se les proponía. Además, haberse informado en todas las fuentes que puse en la página web.

Cuanto más elaborada era la respuesta, más nota merecería dicho alumno.

Es por esto que realicé una tabla exhaustiva para anotar todo tipo de detalles observados en sus contestaciones y así, obtener una nota final bastante precisa.

Observar que todos los alumnos habían adquirido una gran cantidad de conocimientos sobre el tema, además de concienciarse en muchos aspectos relacionados con las acciones del ser humano en el medio, fue una experiencia muy gratificante.

También hay que decir que los alumnos trabajaron y se involucraron al 100% en su tarea poniendo mucho interés en todo lo que hacían y por esto la efectividad de la Webquest fue muy superior a mis expectativas iniciales. Aunque esto, es muy probable que sea debido a la excelente profesional que tienen a su disposición los alumnos de cuarto curso de primaria. 

colaboración de Javier Alcaraz, profesor en prácticas

Yo, como tutora del curso he de reconocer que me admiró el trabajo entragado del profesor de prácticas en la elaboración de la webquest y el resultado de la evaluación. Puedo decir que estoy en proceso de aprender a hacerlas. O sea, que lo estoy pensando. Solo tiene que encontrar el señor Alcaraz tiempo para enseñarme.

Si quieres ponerte a prueba o simplemente tienes curiosidad por saber cómo es una webquest o comprobar con tus propios ojos la categoría de la misma... pincha AQUÍ y lo comprobarás.